Este libro se acerca al tema de cómo algunos viajeros latinoamericanos contemporáneos escriben sus relatos de viajes desde y sobre sus territorios de nacimiento y procedencia. Esta obra tiene como tema central no solo la práctica de la escritura de viajes sino, y no menos importante, la representación de los viajes en América Latina en el siglo xx. Este estudio cuestiona qué tanto los viajeros “regionales” han negociado con esta forma híbrida, pero al mismo tiempo volátil, que ha sido moldeada en gran parte por sus antecesores foráneos.